El presidente editor del grupo Joly habló ayer en Sevilla sobre el futuro de la prensa, las ediciones digitales de pago, el futuro del papel y lo que se ha dado en llamar "el nuevo periodismo".
Para José Joly Martinez de Salazar, estamos en una época de cambios en la que hay que esperar a que el mercado esté maduro para transicionar a las ediciones digitales de pago, que según Joly, serán de mejor calidad y con contenidos más elaborados que las actuales. José Joly también reconoció que el prestigio, la influencia y la rentabilidad de la prensa ha entrado en crisis.
En cierta forma está reconociendo que la prensa, a día de hoy, es un producto de ínfima calidad, aunque las ediciones digitales gratuitas son un producto con gran aceptación y con un número de usuarios que crece a ritmo vertiginoso (según reconoce el presidente del grupo Joly), la mala gestión de la publicidad, la duplicidad de contenidos con otros medios, la falta de elaboración de contenidos propios dignos, hace que, a pesar de todo, las ediciones digitales actuales no sean rentables.
Joly pretende que en unos años se haga una transición a ediciones digitales elaboradas (con lo que reconoce que las de ahora no lo son tanto), por las que se pueda cobrar. Pero la estrategia del "gratis total" que hasta ahora a proporcionado información de baja calidad en los medios de comunicación, va a propiciar que los lectores no suscriban las ediciones de pago ya que el seguir ofreciendo mediocridad gratuita será el arma con la que las empresas editoriales fuertes acabarán con las pequeñas que no soportarán ese cambio al mismo ritmo.
No se puede seguir separando a las empresas que ofrecen servicios de internet de aquellas que llenan de contenidos esos servicios. Estas empresas deben ir de la mano a fin de rentabilizar la información en el pago por los servicios.
Ya hemos hablado aquí del tema de la publicidad, hasta ahora mal gestionada, masiva, de escasa calidad y que en ocasiones desvirtúa los propios contenidos del medio de comunicación.
La transición definitiva a los medios de comunicación en la red debe pasar por:
Rentabilizarlos a partir de una buena gestión de "publicidad de calidad" y de la suscripción de acuerdos y convenios con las empresas proveedoras de servicios de internet.
Apostar por la elaboración de contenidos de calidad y propios que generen interés. Antes en los quioscos sólo se tenía acceso a un número limitado de medios, ahora es un clic lo que separa la elección de uno u otro. Hay que diferenciarse en la calidad.
Replantearse el concepto de periódico no supone que las ediciones digitales de periódicos, televisiones y radios tengan que ofrecer los mismos soportes. La tele es para ver, la radio para oír y el periódico para leer y ver fotos, cada uno especializado en lo suyo y ofreciendo la máxima calidad en su campo.
Volver a confiar en los profesionales de los medios. La contratación de personal poco cualificado y barato y las lamentables situaciones laborales entre los profesionales del sector, no son el mejor camino para conseguir un producto de calidad.
Joly destacó que "la prensa es uno de los formatos más nobles con que la libertad de expresión se presenta. Desde hace al menos un siglo y medio -dijo- ejerce una influencia en la opinión pública que ha mejorado la calidad de la democracia y de sus instituciones". Mas le vale al Sr. Joly aterrizar en el siglo XXI, todo eso que dice ocurrió en una época pasada de la prensa, liderada por medios independientes y hechos día a día por grandes profesionales. Con lo que han dejado en las redacciones, los pastiches que se ven pulular por la red y los kioskos hacen flaco favor al porvenir de la ciudadanía.
Para José Joly Martinez de Salazar, estamos en una época de cambios en la que hay que esperar a que el mercado esté maduro para transicionar a las ediciones digitales de pago, que según Joly, serán de mejor calidad y con contenidos más elaborados que las actuales. José Joly también reconoció que el prestigio, la influencia y la rentabilidad de la prensa ha entrado en crisis.
En cierta forma está reconociendo que la prensa, a día de hoy, es un producto de ínfima calidad, aunque las ediciones digitales gratuitas son un producto con gran aceptación y con un número de usuarios que crece a ritmo vertiginoso (según reconoce el presidente del grupo Joly), la mala gestión de la publicidad, la duplicidad de contenidos con otros medios, la falta de elaboración de contenidos propios dignos, hace que, a pesar de todo, las ediciones digitales actuales no sean rentables.
Joly pretende que en unos años se haga una transición a ediciones digitales elaboradas (con lo que reconoce que las de ahora no lo son tanto), por las que se pueda cobrar. Pero la estrategia del "gratis total" que hasta ahora a proporcionado información de baja calidad en los medios de comunicación, va a propiciar que los lectores no suscriban las ediciones de pago ya que el seguir ofreciendo mediocridad gratuita será el arma con la que las empresas editoriales fuertes acabarán con las pequeñas que no soportarán ese cambio al mismo ritmo.
No se puede seguir separando a las empresas que ofrecen servicios de internet de aquellas que llenan de contenidos esos servicios. Estas empresas deben ir de la mano a fin de rentabilizar la información en el pago por los servicios.
Ya hemos hablado aquí del tema de la publicidad, hasta ahora mal gestionada, masiva, de escasa calidad y que en ocasiones desvirtúa los propios contenidos del medio de comunicación.
La transición definitiva a los medios de comunicación en la red debe pasar por:
Rentabilizarlos a partir de una buena gestión de "publicidad de calidad" y de la suscripción de acuerdos y convenios con las empresas proveedoras de servicios de internet.
Apostar por la elaboración de contenidos de calidad y propios que generen interés. Antes en los quioscos sólo se tenía acceso a un número limitado de medios, ahora es un clic lo que separa la elección de uno u otro. Hay que diferenciarse en la calidad.
Replantearse el concepto de periódico no supone que las ediciones digitales de periódicos, televisiones y radios tengan que ofrecer los mismos soportes. La tele es para ver, la radio para oír y el periódico para leer y ver fotos, cada uno especializado en lo suyo y ofreciendo la máxima calidad en su campo.
Volver a confiar en los profesionales de los medios. La contratación de personal poco cualificado y barato y las lamentables situaciones laborales entre los profesionales del sector, no son el mejor camino para conseguir un producto de calidad.
Joly destacó que "la prensa es uno de los formatos más nobles con que la libertad de expresión se presenta. Desde hace al menos un siglo y medio -dijo- ejerce una influencia en la opinión pública que ha mejorado la calidad de la democracia y de sus instituciones". Mas le vale al Sr. Joly aterrizar en el siglo XXI, todo eso que dice ocurrió en una época pasada de la prensa, liderada por medios independientes y hechos día a día por grandes profesionales. Con lo que han dejado en las redacciones, los pastiches que se ven pulular por la red y los kioskos hacen flaco favor al porvenir de la ciudadanía.
